Page 2 - BOLETIN DIGITAL n77 OCTUBRE

Asociación de Exportadores de Frutas de Chile, A.G.
futura del país, y la de nuestra propia entidad y
actividad. Consecuencias que están en una etapa de
desarrollo, siendo, por lo tanto, tremendamente
importante predecir algunas materias cuya relevancia
debemos considerar de una manera realista, y
actuando en forma consecuente a nivel personal y
como empresarios en todas las instancias en las
cuales nos desenvolvemos. Tenemos claro que, para
abordar los desafíos y tareas que nos depara el
futuro, se hace vital actuar en conjunto, por lo que,
definir cómo actuar en forma cohesionada se hace
indispensable, así como también implementar
acciones concretas que den cuenta, en forma
oportuna y adecuada, de las circunstancias relativas
al país y su respectiva territorialidad”.
Los resultados del Estudio: “2030: Juntos Nuestra
Valdrá Más”, fueron entregados por Diego
Domínguez, Gerente de Proyectos de Matrix
Consulting, empresa contratada para llevar a cabo
este análisis.
“Este estudio tenía como gran objetivo mejorar la
competitividad relativa de la industria, por lo mismo,
fue altamente representativo a nivel de productores,
exportadores, entidades públicas, tanto a nivel local
como internacional. Estuvimos visitando en distintos
países a productores y exportadores, competidores
de Chile, tanto del hemisferio sur, como del
hemisferio norte. Además, se entrevistó a los
principales recibidores de la fruta chilena tanto en
Asia, Europa y Estados Unidos. En total nos
entrevistamos con más de 600 referentes y más de
200 personas a lo largo de las distintas mesas de
trabajo que fueron creadas para avanzar en este
trabajo”, puntualizó.
Domínguez explicó que el estudio contempló el
análisis de las 15 principales frutas frescas que Chile
exporta (las más relevantes en términos de valor),
además también se analizaron 10 temas
transversales, independientes de una especie frutal
en específico, entre los que destacan temáticas
relativas al agua, inocuidad, calidad, fitosanidad,
imagen país, entre otros.
A modo de ejemplo, el profesional describió algunas
materias que revisten interés a nivel de especie,
como es el caso de la necesidad de impulsar una
mayor tecnología de guarda en manzanas; el
recambio varietal en uva de mesa y arándanos; la
presión de nuevos y antiguos competidores en
especies como el arándano, y la necesidad de
diversificar los mercados de exportación, por
ejemplo, para las cerezas.
Asimismo, puntualizó que, si bien el estudio constató
un entorno desafiante para la industria, existen
también buenas noticias y oportunidades dado el
2
aumento esperado en el gasto en frutas y verduras a
nivel mundial. Indicó que se espera que, para el año
2030 este gasto mundial alcancé los USD$5,5 TN,
(+80%), con un crecimiento anual de +6%.
Destacó que, para consolidar el liderazgo de Chile
como exportador de frutas, se deben “accionar 7
palancas” o definir acciones en materias como:
“Sustentabilidad”, “Imagen y Comunicación”,
“Calidad y Condición”, “Recurso Hídrico”,
“Fitosanidad e Inocuidad”, “Mayor Cohesión y
Disposición Gremial” y “Productividad y Eficiencia”.
“En el marco de los siete elementos fundamentales
descritos en el estudio, y que reflejan la necesidad de
actuar a futuro, hemos definido nueve aspectos o
áreas específicas de trabajo. La primera de ellas es la
Mayor cohesión y Disposición Gremial, un elemento
indispensable. Es importante ampliar la cantidad de
empresas socias, así como crear los comités de
productos que faltan, como es el caso de pomáceas,
carozos, uvas de mesa, y respecto al Comité de
Paltas estamos en plenas conversaciones para
realizar actividades en conjunto y mirar el futuro de la
misma manera”, puntualizó Ronald Bown.
Un segundo aspecto, dice relación con la Imagen y
Comunicación. “Los aportes de la fruticultura al país
son importantes, y es importante que se conozcan, y
si no se hace es un contrasentido, especialmente
cuando la imagen es relevante para definir acciones
particulares o colectivas. Debemos trabajar el tema
de la comunicación, y el tema de nuestra imagen sin
lugar a dudas”.
El tema de la Fitosanidad fue descrito por Bown
como la tercera área de acción, puntualizando que “la
situación fitosanitaria del país es tremendamente
crítica, vulnerable, especialmente cuando el Estado
no cuenta con recursos para poder afrontar
adecuadamente dichas exigencias. Ello debe,
necesariamente, complementarse con recursos
privados, de no ser así podemos tener problemas
serios en esta materia”, dijo.
Un cuarto punto de acción definido por la industria
para implementar los ejes críticos descritos por el
estudio es la Inocuidad Alimentaria, tanto a nivel
interno como externo del país. “Otro tema es la
Sustentabilidad General, lo cual es básico también, y
donde en su centro siempre tiene que estar la
persona. Los efectos que puede tener en la persona,
tanto trabajadores como consumidores, todo lo que
hacemos como industria”. A ello agregó la
Sustentabilidad Social, “que la industria no sólo sea
conocida por su aporte natural, sino que también
debe existir un compromiso sectorial, que se palpe
por parte de los habitantes, especialmente, los más
cercanos a nuestras actividades, en los territorios, a